Trucos para hacer croquetas de pollo jugosas

Existen muchos trucos en las recetas de croquetas de pollo para conseguir elaborar croquetas perfectas y queden jugosas en su interior. En este post te hablaremos de nuestros trucos en cuanto a la elaboración de la masa, el rebozado, el tamaño y la forma de cómo freilas. 

Truco 1: La masa debe estar en el punto exacto

Para conseguir unas buenas croquetas lo principal es que la masa debe estar en su punto, pues no buscamos ni natillas de croqueta ni croquetas duras, pretendemos hacer croquetas perfectas, simplemente. Entonces para hacer la bechamel necesitaremos la misma cantidad de harina que de mantequilla o aceite y serán entre 120 y 160 g de cada por cada litro de leche (o caldo o mezcla de ambos). Tan simple como eso. Ahora bien, si las queremos muy cremosas usaremos 120-130 grs. 

Truco 2: El segundo truco es la forma y el rebozado de las croquetas

Si lo hacemos bien, lograremos unas croquetas de pollo perfectas y jugosas que no se abren y con un rebozado crujiente. Y hacerlo bien es muy fácil, solo tenemos que tener en cuenta dos cosas: En cuanto a la forma, podemos dársela con un par de cucharas o simplemente con nuestras manos, intentando que todas las croquetas sean más o menos del mismo tamaño. En cuanto al rebozado, debe ser uniforme y constar de 3 capas: pan rallado fino o harina, huevo batido y pan rallado, preferiblemente grueso, para conseguir un rebozado extra crujiente. Es importante batir bien el huevo para que no queden grumos de clara.

Truco 3: Hacer las croquetas de pollo del tamaño correcto

El tamaño es clave, el indicado es que su diámetro no sea superior a los 2 cm. 

Truco 4: Freír las croquetas de pollo cuando el aceite esté en su temperatura adecuada

Freírlas para que queden perfectas es más fácil de lo que parece. Si es posible las dejamos en la nevera 10 o 15 minutos una vez rebozadas para que el rebozado se seque un poco y se endurezca. El aceite para freír. Mucho mejor si podemos freírlas es un buen aceite de oliva virgen extra porque resisten mejor las temperaturas. En cuanto a la temperatura, lo óptimo es hacerlo a 175-180ºC. El truco es usar un palillo de dientes o un trozo de corcho limpio, los echamos en la sartén y sabremos que el aceite está en su punto cuando veamos que alrededor de ellos se forma un burbujeo constante. 

Cuando estén doradas las croquetas, podemos retirarlas a un papel absorbente si las vamos a comer de inmediato.

¿Y tú? qué esperas para preparar croquetas de pollo jugosas en casa y disfrutarlas con la familia y amigos. Esperamos que nuestros trucos te hayan sido útiles y obtengas los resultados deseados, croquetas sabrosas, crujientes y jugosas. Y si deseas leer más información, te invitamos a revisar otro artículo sobre 3 ideas para presentar las croquetas de pollo en nuestra web.